Una discoteca en Mallorca ofrece a sus clientes sexo en el escenario si se beben diez tequilas. El diario alemán Bild denuncia la degradación de la oferta de ocio en Playa de Palma. Y es que los clientes de la discoteca «Paradies», en su mayoría turistas europeos, no sólo pueden bailar y beber en el local. Ahora también tienen la posibilidad de fornicar en público y sobre el escenario.
Ampliar A las tres y media de la madrugada comienza el espectáculo. Seis chicas muy ligeras de ropa hacen su entrada en el escenario. Segundos después, y mientras los destellos de las luces y el ruido de una música estrepitosa saturan hasta la saciedad el ambiente enrarecido que apesta a sudor y alcohol, aparece el presentador y grita: «Bienvenidos a la orgía de Paradies... ¿Quién quiere participar?... ¿Quién quiere subir al escenario?»
Se oyen aplausos, murmullos, silbidos... La masa humana de hombres jóvenes y no tan jóvenes, procedentes casi todos los países de Europa y en su mayoría alemanes, se acerca aún más. Todos saben que ahora viene lo bueno, lo que han venido a buscar y con suerte participar. Muchos quieren subir, pero sólo les será permitido a seis.
De nuevo se oye al presentador que dice: «¡El que sea capaz de beber 10 tequilas puede follar con la bailarina en el escenario!». Muchos llevan más del doble de alcohol en el cuerpo. Las chicas, ya casi desnudas, preparan los condones. Los seis «afortunados» que han sido capaces de cumplir el requisito y todavía mantenerse en pie, suben sin demora. El resto, que ha pagado 15 Euros por entrar, se queda en la pista mirando. Todos van a ser testigos de una orgía de sexo real y salvaje en público donde todo vale.
Es un espectáculo porno y cutre que demuestra hasta qué punto ha llegado la degeneración del ocio en Mallorca, dice el diario alemán Bild. Escribe este periódico que uno de los jóvenes estaba tan borracho que no pudo conseguir la erección. «Lo abuchearon y tuvo que bajar del escenario» dice uno de los testigos al diario. Uno de los participantes, que prefirió que le hicieran una felación, dijo después: «Yo quería experimentar algo nuevo, pero la chica me ha mordido y eso es más doloroso que emocionante...»
Los folletos y anuncios están en todas partes.