Según informa el diario Daily Mail, los científicos han llegado a la conclusión de que una nariz prominente puede evitar que se contagien enfermedades como resfriados o gripes. Cuanto más grande sea la nariz, más grande es la berrera natural que hace que las partículas de polvo y las bacterias que hay en el aire no puedan entrar en el cuerpo humano.
Los científicos que han realizado este estudio han descubierto que una nariz grande inhala casi el 7% menos de contaminantes y también actúa como una barrera para desviar los gérmenes de la boca.
La investigación ha sido llevada a cabo por un grupo de científicos de la Universidad de Iowa y sus resultados han sido publicados en la revista Annals of Occupational Hygiene.
"Reduce el riesgo de infecciones"
El Doctor Renee Anthony, director del estudio, afirma, en unas declaraciones recogidas por el diario británico, que "la nariz sobresale y le da una mejor protección a la boca, por lo que una nariz grande puede reducir el riesgo de ser infectados y también se puede trabajar en cómo afecta el polen".
