Las ventajas de la batería de azúcar, a diferencia de las convencionales que contienen combustible a base de hidrógeno o metanol, son: que no es inflamable, explosiva y almacena gran cantidad de energía de una fuente natural.
"El azúcar es un perfecto almacenamiento de energía existente en la naturaleza, así que es lógico que queramos aprovechar ese poder natural para crear una batería que, además, es respetuosa con el medio ambiente", comentó Percival Zhang, uno de los creadores.
Los investigadores calculan que las personas podremos adquirir la batería a base de azúcar dentro de tres años.
