Thomas, es condenado a muerte por asesinar a puñaladas a su esposa, a su hijo y a una hijastra de 13 meses, a quienes les extrajo el corazón, ya se había sacado y comido un ojo cuando esperaba el juicio en 2004, según fuentes oficiales citadas por medios locales.
Fuentes del Departamento de Justicia Criminal en Texas ha indicado que de momento se desconoce cómo Thomas, de 25 años, se extrajo el único ojo que le quedaba, aunque todo apunta a que aparentemente solo usó sus dedos para hacerlo.
Tras el último incidente Thomas fue enviado de inmediato a una clínica psiquiátrica. “Allí recibirá la atención para su salud mental que estaba pidiendo desde el principio”, ha señalado el fiscal Bobbie Peterson al diario “Sherman Herald Democrat”.